Las Patillas de la Cordialidad

Titulo: LAS PATILLAS DE LA CORDIALIDAD

Artista: Ana mercedes hoyos

Material: lámina de acero

Longitud de 14 metros

Ubicación: Parque metropolitano el Tunal

Fecha de instalación: 20/12/2000

Publicado por: Andrea Tatiana Cárdenas Cruz

Siendo la quinta escultura instalada ese año por la alcaldía mayor de Bogotá, luego del plan de recuperación del espacio público liderado por el alcalde Peñalosa, esta obra de arte público figurativo, precedida por la brillante Mariposa de Negret en San Victorino, el Hombre a Caballo del maestro Botero en el Parque Renacimiento, Rita 5:30 pm en homenaje a los 80 años de Enrique Grau y la pieza Pórtico de Ramírez Villamizar, fue instalada en el parque el Tunal el 20 de diciembre del 2000, embelleciendo la capital, y haciendo de este espacio recreativo un lugar más ameno, y como se lo propuso su autora convirtiéndose en un símbolo de sana convivencia entre las personas que siempre hemos disfrutado el parque, y entre las que hasta ahora lo están conociendo.

Respecto a ¿qué la inspiro? Respondió la artista:

"Hace unos 12 años viajaba por la Carretera de La Cordialidad, que une las ciudades de Cartagena y Barranquilla. En el camino encontré una venta de patillas, con dos enormes tajadas exhibidas sobre cantidades de patillas enteras. En medio del calor del trópico y con mi garganta reseca, tomé muchas fotografías, desde ese momento las patillas se convirtieron en tema recurrente de mi obra pictórica"

Estas “Dos enormes tajadas de jugosa y dulce patilla de pulpa roja, carnosa y dulce y con abundantes semillas aplanadas” no dan hambre si no ganas de encaramarse y resbalase sobre ellas. A veces cuando voy hacer deporte en el parque me apoyo sobre algún trozo de patilla para realizar ciertos ejercicios, (de todas formas la fruta es buena para la salud) pero no me gusta cuando le dan balonazos o cuando la rayan, a veces es una escultura agredida aunque siempre siempre será una escultura apropiada aunque suene contradictorio. “Bueno, las cosas que queremos a veces también las maltratamos”

Ojala otra persona haya mirado esta escultura tanto como yo, ella me inspira respeto y un poco de miedo, pero cuando llueve uno se puede resguardar bajo la sombra de la tajada izquierda que es la mas larga y la más amable, además cuando hay algún evento en el parque uno de los puntos de encuentro son las patillas, nadie se puede perder. Siempre pienso en ¿Cómo? su propio peso las hace estar hay, inmóviles, firmes, monumentales y serias muy serias, puestecitas con tanto cuidado como cuando uno coloca sobre la mesa de su casa un pedazo de patilla que compro en la calle; y es, esa sensación de quietud que genera esta escultura, la que me hace detener a mí y a muchas personas a contemplarla.

Si estas “Dos enormes tajadas de jugosa y dulce patilla de pulpa roja, carnosa y dulce y con abundantes semillas aplanadas” no hubieran perdido el rojo color de su pulpa (si es que alguna vez tuvieron color) serian aun más atractivas, sin embargo su forma de pálida fruta atrae más espectadores cada fin de semana, más balonazos, más niños que se le encaraman y más deportistas. En verdad que bueno que el arte llegue a sitios como este en donde si hay gente que lo vea, que interactué con el, y no en un rincón oscuro y alejado de la ciudad en donde solo el frio lo visite.

A las personas entrevistadas en el parque lo que les llama la atención de la obra es, primero su tamaño de gran patilla, segundo su material y color de acero que empieza a oxidarse y tercero, encontrársela allí precisamente como si fuera otro visitante del parque y no en un museo, por ejemplo, en donde su estética no seria tan acertada. Para algunos el hierro es un material triste en contraposición a la alegría de un parque, mientras otros piensan que es precisamente el material y el tamaño el que le da significado a la obra y carácter al lugar.

ANA MERCEDES HOYOS

Es una de las figuras más sobresalientes del arte latinoamericano actual. Estudio plástica en la Universidad de Los Andes y ha participado en colectivas alrededor del mundo representando a Colombia internacionalmente. En 1978 recibe el primer premio en el XXVIII Salón Nacional de Artes Visuales con “Atmósfera”, y es invitada a la muestra América Latina — Geometría Sensible en el Museo de Arte Moderno de Río de Janeiro. Ha expuesto individualmente en Bogotá, Buenos Aires, Caracas, Nueva York, Tokio, Santiago, Los Ángeles, México, Monterrey.. Su obra, con comentarios de autorizados críticos, ha sido publicada en cuatro libros anteriores y en revistas como Art News, Newsweek, Time y Art in América. En años recientes ha recibido distinciones e invitaciones del Gobierno de Japón y Estados Unidos, y ha sido condecorada por la Cámara de Representantes de Colombia, la Alcaldía Mayor de Bogotá y la Policía Nacional de Colombia por sus aportes a la cultura del país. La Universidad de Antioquia le otorgó Honoris Causa el grado de maestra en Bellas Artes. Actualmente trabaja en Bogotá y Nueva York, y adelanta proyectos de escultura en bronce y lámina de hierro en ciudad de México y Monterrey.

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